Los investigadores de ICYTAC Mariana Lingua, Daniel Wunderlin y María Verónica Baroni, en colaboración con María Fabiani de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan, comprobaron que algunos alimentos, como la uva y sus restos, ayudan a prevenir enfermedades y el llamado “estrés oxidativo”.
El llamado “estrés oxidativo” es el proceso mediante el cual las células se dañan, promoviendo la aparición de enfermedades así como también la anticipación de la vejez. Algunos alimentos ayudan a prevenir estas situaciones dado su alto contenido en antioxidantes.
Este efecto antioxidante reside en los polifenoles (junto con los carotenos y la vitamina E). En este caso los investigadores analizaron a la uva, tres variedades de vino y los restos de la fruta que se descartan en el proceso de elaboración.
La uva y el vino son muy buenos antioxidantes. La variedad Syrah es la que mayores propiedades antioxidantes presentó, seguidos del Cabernet Sauvignon y, por último, el Merlot. Los restos de la uva también registraron una alta concentración de polifenoles. El desafío, ahora, es aprovecharlos como ingredientes de algún otro tipo de alimento que pueda ser desarrollado a futuro.
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